Va pasando el tiempo y definitivamente uno ya no piensa igual, el tiempo pasa y la vida se vuelve más fría y vas encontrando de alguna u otra manera un camino, vas sabiendo que prefieres leer a Levi-Strauss que ha Pierre bourdieu, también que los ángeles no tienen alas y que no todos los santos eran buenos y si les rezaba mis plegarias iban al cielo solemente se perdían en el viento.
Las relaciones sentimentales de antes ya no son iguales que a los 22 años, uno se vuelve frío y el estructuralismo comienza a pesar en la vida cotidiana, a los 23 ya no siento que las relaciones sean igual que antes, a los 23 siento que hasta estar acompañada por una persona que no sea mi amigo por mucho tiempo me incomoda, a los 23 ya no se busca a la pareja ideal, a los 23 se busca una persona con la que puedas crecer que de una u otra manera, no buscas que sea bonita o bonito, que te atraiga o no, buscas que sus proyectos coincidan con los tuyos, que de alguna u otra forma no te retrase sino que se pueda avanzar a la par.
La vid va pasando cada vez tiene más bemoles, cada vez tiene más complicaciones, pero a la vez se simplifica, los errores del ayer quedan en el ayer y creces y aprendes, conoces y sabes lo que quieres... es que la vida tiene más bemoles de los que yo creía pero se van superando
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